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¡Por los obreros de los frigoríficos! El día que los jugadores de Rampla y Cerro se pusieron la camiseta de su eterno rival

Foto del libro El clásico Rampla - Cerro de Miguel Aguirre Bayley



La Villa obrera del Cerro estaba movilizada. La vida se había puesto dura. El gobierno había decretado la congelación de precios y salarios. Los uruguayos estallaron. Los números eran contundentes. En 1968 se habían producido 351 paros, 134 huelgas y 7 ocupaciones en las oficinas y empresas públicas; 95 paros, 130 huelgas y 80 ocupaciones en empresas privadas; y 56 huelgas, 40 ocupaciones y 220 manifestaciones del movimiento estudiantil, según se revela en la web Zur.org.uy.

 

Al año siguiente, 1969, ardieron los frigoríficos. En abril comenzó una huelga que involucró a 14 mil obreros. La industria más importante del país y el sector obrero con mayor capacidad de movilización.

 

El motor de la industria frigorífica estaba en el Cerro. Por lo que el contacto con los clubes de fútbol de la zona era cosa de todos los días. Cuentan los memoriosos que por esos tiempos Rampla Juniors y Cerro llenaban las canchas. Es que los obreros de los frigoríficos iban a ver sus partidos.

 

Es más, el periodista Enrique Yannuzzi, aportó que “a muchos socios de Rampla el frigorífico les descontaba la cuota social del club”.

El tema es que la huelga se extendió más de la cuenta y la crisis empezó a golpear.

 

“Cuando yo llegué a Cerro los frigoríficos ya estaban cerrados. No me olvido más de la imagen de los obreros en huelga poniendo, en la vereda de la Avenida que da la cancha de Cerro, su cocina y su heladera a la venta”, reveló desde Asunción el entonces golero de Cerro, Ever Hugo Almeida, a Que la cuenten como quieran.

 

Su compañero de equipo, Roberto Burgos, expresó a Que la cuenten que la quieran: “Había mucha movilización en el Cerro con las huelgas vinculadas al tema de los frigoríficos” y agregó una anécdota que le tocó vivir con los obreros.


 

“Yo vivía en la residencia de Cerro con tres o cuatro compañeros más del interior, entre ellos Almeida, y cuando íbamos a entrenar el ómnibus nos dejaba en la Plaza Lafone. Para acortar camino, atravesábamos un puente atrás del frigorífico que daba al parque Causeglia, que era la cancha de inferiores de Cerro. Un día que estaba oscuro cruzamos el puente y nos salieron al cruce los muchachos del frigorífico que hacían el piquete. Pensaban que éramos carneros que íbamos a trabajar. Nos salvamos porque alguien nos reconoció como jugadores de Cerro”, recordó Burgos.

 

Y agregó que en el club estaban al tanto de todo lo referido a la huelga porque los padres de Néstor Salaverry (jugador de Cerro) eran empleados del frigorífico. “Terminaba la práctica y Néstor se cambiaba y se iba rápido. Nos decía que no se podía quedar porque iba a colaborar con los muchachos en el piquete. Y se iba al piquete arriba del puente. Era increíble”.

 

Por los obreros

Luis Ubiña

Paralizada la industria, los obreros no la estaban pasando bien. La crisis golpeó al Cerro. La gente sacaba a la calle sus pertenencias para venderlas y de esa formar poder parar la olla.

 

Fue entonces como tres hijos de las entrañas del barrio y reconocidos jugadores de la selección como Juan Martín Mugica, Luis Peta Ubiña y Juan Carlos Paz, tomaron la iniciativa de realizar una movida solidaria.

 

Y lograron un hecho inédito que jamás se reiteró en el tiempo: que Rampla y Cerro se unieran para jugar un amistoso contra la selección uruguaya que se preparaba para el Mundial de México 1970.

 

El martes 3 de junio de 1969 los eternos rivales se unieron para medirse contra Uruguay en el Parque Saroldi.

 

“No sé los motivos, pero la selección entrenaba en el Saroldi. A mí me venía bárbaro porque yo vivía en Agraciada y Asencio e iba caminando a hacer notas para BP Color. El Saroldi se llenaba para ver a la selección. No me olvido más del día que me senté al lado del Pardo Abbadie que para mí era como sentarme al lado de un monstruo”, rememoró Enrique Yannuzzi.

 

Lo curioso e inédito del caso es que, además de Rampla y Cerro, los jugadores de la selección se prestaron al acto solidario de jugar a beneficio de los obreros de los frigoríficos, que serían los destinatarios de la recaudación del partido.

 

Aquella no era una selección más. Jugaban Pedro Virgilio Rocha, Julio César Morales, Luis Alberto Cubilla, Roberto Matosas, Atilio Ancheta, entre otros. De hecho, fue el equipo que terminó cuarto en el Mundial de México 70.

 

Para darle otro condimento a la historia, una semana después de jugar contra los villeros, la selección recibiría en el Centenario al entonces campeón del mundo Inglaterra.

 

“¡Cómo no nos íbamos a prestar! Mi viejo, Luis María Jauregui, vivía en el barrio, era hincha de Cerro y laburaba en el frigorífico. Era matambrero”, reveló el entonces jugador de la selección Baudilio Jauregui a Que la cuenten como quieran.

 

El periodista Enrique Yannuzzi aportó: “Cuando se dio eso estaba todo el Cerro unido. Todos. El gran motor de Cerro y Rampla era la industria frigorífica”.

 

Nicolás Mastoros, exjugador de Rampla que jugó aquel partido, rememoró en diálogo con Que la cuenten como quieran: “Ellos (la selección) se estaban entrenando y tenían un cuadrazo. Fue la selección que luego terminó cuarta en el Mundial del 70”.

 

¿Con qué camiseta jugaron?

Trasladar el partido a la actualidad implica irremediablemente hacerse una serie de preguntas: ¿con qué camiseta jugó el combinado de la Villa? ¿Con la de Rampla o la de Cerro? ¿No hicieron problema los jugadores de Cerro ante la eventualidad de tener que ponerse la rojiverde de Rampla?

El anuncio de El Telégrafo de Paysandú



 

“El primer partido los jugamos con la camiseta de Cerro y el segundo con la de Rampla. ¿Si tuve problemas para ponerme la de Rampla? ¡No! Para nada. Aquella era una acción solidaria, por la gente, y estábamos todos en lo mismo. Incluso yo tenía amigos de Salto como Betteato, Argimoni, que jugaban en Rampla y eran amigos. En aquella época me acuerdo que íbamos a la playa del Cerro con Almeida y Bertinat y nos encontrábamos con Ramón Mármol y tomábamos mate todos juntos”, rememoró Burgos.

 

La particularidad del partido fue que en el preliminar el combinado de la Villa del Cerro estuvo integrado por la defensa albiceleste y el ataque de Rampla, viceversa en el segundo juego, según reveló Miguel Aguirre Bayley en el libro El clásico Rampla-Cerro.

 

El encuentro se disputó en medio de un fangal porque el día previo había llovido. Pese a ello, nadie puso reparos, ni siquiera el técnico de la selección. Y, a pesar de las inclemencias del tiempo, la cancha de River Plate se llenó. La gente fue por los obreros de los frigoríficos.

 

Con el paso de los años Roberto Burgos recuerda aquel partido con nostalgia. “Fue un caso único. No creo que se vuelva a repetir. No es común que Cerro y Rampla se junten, y encima que una selección se involucre en la lucha obrera. Aquello fue único”.


Los detalles

Preliminar

El partido finalizó empatado 2 a 2, con goles de Luis Cossú de Rampla, Rubén Bareño (Uruguay), Waldemar Cáceres (Uruguay) y Romero (Cerro). El árbitro fue Oclides Leitón.

Uruguay: Luis Dogliotti (Nacional), Baudilio Jauregui (Defensor), Juan Carlos Paz (Rampla) Pablo Forlán (Peña ol), Dagoberto Fontes (Defensor), Alberto Martínez (Rampla), R. Martínez (Cerro), R. Pérez (Bella Vista), Walter Cáceres (Rampla), Rubén Techera (Nacional) y Rubén Bareño (Cerro).

Combinado de la Villa: Ever Almeida (Cerro), Barone (Cerro), Suárez (Cerro), Burgos (Cerro), Manuel Sierra (Cerro), Luis Gómez Lugo (Cerro); Roberto Álvarez (Rampla), Luis Cossú (Rampla), Oscar Tomás López (Rampla), Julio César Curbelo (Rampla) y Heber Silveira (Rampla).

 

Partido de fondo

En el partido de fondo el combinado de la Villa estuvo conformado por la defensa de Rampla y el avance de Cerro. La selección ganó 3-1 y el árbitro fue Armando Peña Rocha.

Los goles celestes fueron convertidos por Pedro Virgilio Rocha, Julio César Morales y Héctor Silva. Para los villeros anotó el picapiedra Antonio Davezac.

Uruguay: Roberto Sosa (River), Atilio Ancheta (Nacional), Roberto Matosas (Peñarol), Luis Ubiña (Nacional), Julio Montero Castillo (Nacional) y Juan Martín Mugica (Nacional), Luis Alberto Cubilla (Nacional), Pedro Rocha (Peñarol), Héctor Silva (Peñarol), Julio César Cortés (Cerro) y Julio César Morales (Nacional)

Combinado de la Villa del Cerro: Luis Acosta (Rampla), Juan Ángel Betteato (Rampla), Cherlián (Rampla), Ramón Mármol (Rampla), Eduardo Rivera (Rampla), Nicolás Mastoros (Rampla), Mattera (Cerro), Tessa (Cerro), Luis Del Río (Cerro), Antonio Davezac (Rampla) y Salaverry (Cerro).

Datos del libro El clásico Rampla - Cerro de Miguel Aguirre Bayley

Comentarios

  1. Muy bueno Felicitaciones por la Nota Periodistica

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  2. Excelente historia, con una interesante y amena contextualización histórica, en una época que se profundizaba la crisis socioeconómica, al tiempo que también la institucionalidad se deterioraba.
    Refleja además la idiosincrasia de una barriada obrera y la la conciencia de una clase social.
    Muy lindo relato,que da lección de unidad, de luchar por una causa justa y común.
    Muchas gracias.

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  3. La mejor nota que vi, los re felicito!

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  4. Excelente porque no es "cuento" y nos recuerda que la lucha es una sola,futbolistas y obreros son Pueblo.

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  5. Me lleva a rememorar tiempos muy lejanos, pero a sentir en el corazon laisma emoción que aquella tarde. Gracias mil.

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