¡Por los obreros de los frigoríficos! El día que los jugadores de Rampla y Cerro se pusieron la camiseta de su eterno rival
La Villa obrera del Cerro estaba movilizada. La vida se había puesto dura. El gobierno había decretado la congelación de precios y salarios. Los uruguayos estallaron. Los números eran contundentes. En 1968 se habían producido 351 paros, 134 huelgas y 7 ocupaciones en las oficinas y empresas públicas; 95 paros, 130 huelgas y 80 ocupaciones en empresas privadas; y 56 huelgas, 40 ocupaciones y 220 manifestaciones del movimiento estudiantil, según se revela en la web Zur.org.uy.
Al
año siguiente, 1969, ardieron los frigoríficos. En abril comenzó una huelga que
involucró a 14 mil obreros. La industria más importante del país y el sector
obrero con mayor capacidad de movilización.
El
motor de la industria frigorífica estaba en el Cerro. Por lo que el contacto
con los clubes de fútbol de la zona era cosa de todos los días. Cuentan los memoriosos
que por esos tiempos Rampla Juniors y Cerro llenaban las canchas. Es que los
obreros de los frigoríficos iban a ver sus partidos.
Es
más, el periodista Enrique Yannuzzi, aportó que “a muchos socios de Rampla el
frigorífico les descontaba la cuota social del club”.
El
tema es que la huelga se extendió más de la cuenta y la crisis empezó a
golpear.
“Cuando
yo llegué a Cerro los frigoríficos ya estaban cerrados. No me olvido más de la
imagen de los obreros en huelga poniendo, en la vereda de la Avenida que da la
cancha de Cerro, su cocina y su heladera a la venta”, reveló desde Asunción el entonces
golero de Cerro, Ever Hugo Almeida, a Que
la cuenten como quieran.
Su
compañero de equipo, Roberto Burgos, expresó a Que la cuenten que la quieran: “Había mucha movilización en el Cerro
con las huelgas vinculadas al tema de los frigoríficos” y agregó una anécdota que
le tocó vivir con los obreros.
“Yo
vivía en la residencia de Cerro con tres o cuatro compañeros más del interior, entre
ellos Almeida, y cuando íbamos a entrenar el ómnibus nos dejaba en la Plaza
Lafone. Para acortar camino, atravesábamos un puente atrás del frigorífico que
daba al parque Causeglia, que era la cancha de inferiores de Cerro. Un día que estaba
oscuro cruzamos el puente y nos salieron al cruce los muchachos del frigorífico
que hacían el piquete. Pensaban que éramos carneros que íbamos a trabajar. Nos
salvamos porque alguien nos reconoció como jugadores de Cerro”, recordó Burgos.
Y
agregó que en el club estaban al tanto de todo lo referido a la huelga porque
los padres de Néstor Salaverry (jugador de Cerro) eran empleados del
frigorífico. “Terminaba la práctica y Néstor se cambiaba y se iba rápido. Nos
decía que no se podía quedar porque iba a colaborar con los muchachos en el
piquete. Y se iba al piquete arriba del puente. Era increíble”.
Por los obreros
Paralizada
la industria, los obreros no la estaban pasando bien. La crisis golpeó al
Cerro. La gente sacaba a la calle sus pertenencias para venderlas y de esa
formar poder parar la olla.
Fue
entonces como tres hijos de las entrañas del barrio y reconocidos jugadores de
la selección como Juan Martín Mugica, Luis Peta Ubiña y Juan Carlos Paz,
tomaron la iniciativa de realizar una movida solidaria.
Y
lograron un hecho inédito que jamás se reiteró en el tiempo: que Rampla y Cerro
se unieran para jugar un amistoso contra la selección uruguaya que se preparaba
para el Mundial de México 1970.
El
martes 3 de junio de 1969 los eternos rivales se unieron para medirse contra
Uruguay en el Parque Saroldi.
“No
sé los motivos, pero la selección entrenaba en el Saroldi. A mí me venía
bárbaro porque yo vivía en Agraciada y Asencio e iba caminando a hacer notas para
BP Color. El Saroldi se llenaba para ver a la selección. No me olvido más del
día que me senté al lado del Pardo Abbadie que para mí era como sentarme al
lado de un monstruo”, rememoró Enrique Yannuzzi.
Lo
curioso e inédito del caso es que, además de Rampla y Cerro, los jugadores de
la selección se prestaron al acto solidario de jugar a beneficio de los obreros
de los frigoríficos, que serían los destinatarios de la recaudación del partido.
Aquella
no era una selección más. Jugaban Pedro Virgilio Rocha, Julio César Morales,
Luis Alberto Cubilla, Roberto Matosas, Atilio Ancheta, entre otros. De hecho,
fue el equipo que terminó cuarto en el Mundial de México 70.
Para
darle otro condimento a la historia, una semana después de jugar contra los
villeros, la selección recibiría en el Centenario al entonces campeón del mundo
Inglaterra.
“¡Cómo
no nos íbamos a prestar! Mi viejo, Luis María Jauregui, vivía en el barrio, era
hincha de Cerro y laburaba en el frigorífico. Era matambrero”, reveló el
entonces jugador de la selección Baudilio Jauregui a Que la cuenten como quieran.
El
periodista Enrique Yannuzzi aportó: “Cuando se dio eso estaba todo el Cerro
unido. Todos. El gran motor de Cerro y Rampla era la industria frigorífica”.
Nicolás
Mastoros, exjugador de Rampla que jugó aquel partido, rememoró en diálogo con Que la cuenten como quieran: “Ellos (la
selección) se estaban entrenando y tenían un cuadrazo. Fue la selección que
luego terminó cuarta en el Mundial del 70”.
¿Con qué camiseta jugaron?
Trasladar
el partido a la actualidad implica irremediablemente hacerse una serie de
preguntas: ¿con qué camiseta jugó el combinado de la Villa? ¿Con la de Rampla o
la de Cerro? ¿No hicieron problema los jugadores de Cerro ante la eventualidad
de tener que ponerse la rojiverde de Rampla?
El anuncio de El Telégrafo de Paysandú |
“El
primer partido los jugamos con la camiseta de Cerro y el segundo con la de
Rampla. ¿Si tuve problemas para ponerme la de Rampla? ¡No! Para nada. Aquella
era una acción solidaria, por la gente, y estábamos todos en lo mismo. Incluso yo
tenía amigos de Salto como Betteato, Argimoni, que jugaban en Rampla y eran
amigos. En aquella época me acuerdo que íbamos a la playa del Cerro con Almeida
y Bertinat y nos encontrábamos con Ramón Mármol y tomábamos mate todos juntos”,
rememoró Burgos.
La
particularidad del partido fue que en el preliminar el combinado de la Villa
del Cerro estuvo integrado por la defensa albiceleste y el ataque de Rampla, viceversa
en el segundo juego, según reveló Miguel Aguirre Bayley en el libro El clásico Rampla-Cerro.
El
encuentro se disputó en medio de un fangal porque el día previo había llovido. Pese
a ello, nadie puso reparos, ni siquiera el técnico de la selección. Y, a pesar
de las inclemencias del tiempo, la cancha de River Plate se llenó. La gente fue
por los obreros de los frigoríficos.
Con
el paso de los años Roberto Burgos recuerda aquel partido con nostalgia. “Fue
un caso único. No creo que se vuelva a repetir. No es común que Cerro y Rampla
se junten, y encima que una selección se involucre en la lucha obrera. Aquello fue
único”.
Los detalles
Preliminar
El
partido finalizó empatado 2 a 2, con goles de Luis Cossú de Rampla, Rubén
Bareño (Uruguay), Waldemar Cáceres (Uruguay) y Romero (Cerro). El árbitro fue
Oclides Leitón.
Uruguay:
Luis Dogliotti (Nacional), Baudilio Jauregui (Defensor), Juan Carlos Paz
(Rampla) Pablo Forlán (Peña ol), Dagoberto Fontes (Defensor), Alberto Martínez
(Rampla), R. Martínez (Cerro), R. Pérez (Bella Vista), Walter Cáceres (Rampla),
Rubén Techera (Nacional) y Rubén Bareño (Cerro).
Combinado
de la Villa: Ever Almeida (Cerro), Barone (Cerro), Suárez (Cerro), Burgos
(Cerro), Manuel Sierra (Cerro), Luis Gómez Lugo (Cerro); Roberto Álvarez
(Rampla), Luis Cossú (Rampla), Oscar Tomás López (Rampla), Julio César Curbelo
(Rampla) y Heber Silveira (Rampla).
Partido
de fondo
En
el partido de fondo el combinado de la Villa estuvo conformado por la defensa
de Rampla y el avance de Cerro. La selección ganó 3-1 y el árbitro fue Armando
Peña Rocha.
Los
goles celestes fueron convertidos por Pedro Virgilio Rocha, Julio César Morales
y Héctor Silva. Para los villeros anotó el picapiedra Antonio Davezac.
Uruguay:
Roberto Sosa (River), Atilio Ancheta (Nacional), Roberto Matosas (Peñarol),
Luis Ubiña (Nacional), Julio Montero Castillo (Nacional) y Juan Martín Mugica
(Nacional), Luis Alberto Cubilla (Nacional), Pedro Rocha (Peñarol), Héctor
Silva (Peñarol), Julio César Cortés (Cerro) y Julio César Morales (Nacional)
Combinado
de la Villa del Cerro: Luis Acosta (Rampla), Juan Ángel Betteato (Rampla),
Cherlián (Rampla), Ramón Mármol (Rampla), Eduardo Rivera (Rampla), Nicolás
Mastoros (Rampla), Mattera (Cerro), Tessa (Cerro), Luis Del Río (Cerro),
Antonio Davezac (Rampla) y Salaverry (Cerro).
Datos del libro El clásico Rampla - Cerro de Miguel Aguirre Bayley
Muy bueno Felicitaciones por la Nota Periodistica
ResponderEliminarExcelente historia, con una interesante y amena contextualización histórica, en una época que se profundizaba la crisis socioeconómica, al tiempo que también la institucionalidad se deterioraba.
ResponderEliminarRefleja además la idiosincrasia de una barriada obrera y la la conciencia de una clase social.
Muy lindo relato,que da lección de unidad, de luchar por una causa justa y común.
Muchas gracias.
La mejor nota que vi, los re felicito!
ResponderEliminarExcelente porque no es "cuento" y nos recuerda que la lucha es una sola,futbolistas y obreros son Pueblo.
ResponderEliminarExcelente nota...
ResponderEliminarExcelente nota...
ResponderEliminarMe lleva a rememorar tiempos muy lejanos, pero a sentir en el corazon laisma emoción que aquella tarde. Gracias mil.
ResponderEliminarExcelente.
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