Por una vez, piensen en los jugadores, no en el bolsillo propio
En medio de la pandemia el mensaje invade. La premisa es volver a jugar. Los
dirigentes de la gremial de futbolistas pueden dar fe de los innumerables
llamados que recibieron con la referida sugerencia. Si hasta les preguntaron si
la solución pasaba por empezar jugando a puertas cerradas.
El
mundo no encuentra la salida. No existe vacuna que permita frenar el avance del
coronavirus. Pero parece que la prioridad de algunos es salvar el negocio.
Poner la fábrica a rodar, sin importar la salud de los que tienen que entrar a
la cancha.
¿Quién
se hace cargo de la salud de los jugadores? Ni siquiera hay que ir al extremo
de un choque de cabezas entre dos futbolistas. No.
Simplemente
alcanza con preguntarse: ¿Qué pasa con los agarrones dentro del área? ¿Y con
algo tan común como salivar en el campo de juego? Sí habrá conductas que
modificar antes de pensar en volver a jugar al fútbol…
A
partir de ahora habrá que ser cuidadoso hasta en los entrenamientos. Hay muchos
detalles que formarán parte de una tarea de reeducar.
Aunque
parezca mentira, será como volver a la escuela. Pero no miren solo a los
futbolistas del primer equipo, abajo también habrá una titánica tarea por
realizar. En las formativas.
Una
de las bases del fútbol es el compañerismo. Y un grupo se consolida justamente compartiendo
el día a día. El mate, el asado, la botella de agua, el chaleco que se saca el
titular y se lo pasa al suplente para que ocupe su lugar en un entrenamiento.
¿Cómo hacemos con este maldito virus, para hacer todo eso, hasta tanto no se
encuentre una vacuna?
Pero
hay más detalles. Porque primero se piensa en la liga de cada país pero nadie
imagina cómo, cuándo, y bajo que normas de salud se retomarán los torneos
internacionales.
Si
por estas tierras llegan las dolorosas imágenes de lo que sucede en Ecuador con
el avance del coronavirus, resulta al menos impensable pensar que un equipo del
referido país venga a jugar a Montevideo un partido de Copa Sudamericana. ¿Y la
revancha? ¿Cómo se procede con el plantel del equipo uruguayo que tenga que ir
a Ecuador?
Ni
pensar en Brasil, país con mayor número de casos de COVID-19 en el continente y
que cuenta con más equipos participantes en la Copa Libertadores de América.
Basta
con ver el cordón sanitario que se montó en Uruguay, a los efectos de sacar a
ciudadanos extranjeros anclados en barcos, para cobrar real dimensión del
problema. Pero algunos piensan en volver a jugar...
Está
claro que todos quieren que vuelva el fútbol y los primeros deben ser los propios
futbolistas. De hecho, viven de eso. Pero a esta altura, jugar es un detalle. Hay
que ser cuidadoso con los mensajes. Hay gente muriendo en todo el mundo. Por
una vez, piensen en los verdaderos protagonistas del juego: los jugadores y no en
el bolsillo propio.
Debe de haber hasta jugadores que no comen todas las comidas incluso con hijos a cargo. Los verdaderos protagonistas son ellos..... Abrazo Jorge querido
ResponderEliminarEsto es un mal que ataca a toda la sociedad en su conjunto.
ResponderEliminarCada uno la va llevando como puede.
El fútbol no escapa a esta realidad.
Hay varios jugadores (los menos) que con el sueldo que cobran no les pasa nada si por unos meses no cobran.
Hay otros seguramente la inmensa mayoría que necesita de sus haberes para llevar el plato de comida a su familia.
La situación está complicada desde todo punto de vista y cualquiera sea la solución no va a conformar a todas las partes.
Suerte en este nuevo emprendimiento.
Abrazo Nacho.
Excelente Nacho.
ResponderEliminar👏👏👏
Excelente Nacho notable nota
ResponderEliminarEs la cruel realidad,abrazo grande Nacho
ResponderEliminarMuy buena, Seño. Hay que cuidar a todos, porque todos hacen posible lo que tenemos.
ResponderEliminarExcelente análisis Nacho y muy bueno para reflexionar y pensar en nuevas soluciones,abrazo y éxitos.
ResponderEliminarExcelente amigo su fotografía de la ocación.
ResponderEliminarToda el engranaje del fútbol desde formativas a primera división conlleva una cantidad igual o muy cercana de soporte logístico y de personas vinculadas, lo que sin dudas y por lo menos en estas condiciones de un entorno contaminado o con un alto grado de psicosis colectiva es un disparate mayúsculo.
Los más interesados en el retorno de la actividad, lamentablemente y como siempre pasa, son los que lucran con el trabajo de los técnicos, preparadores, equipiers, cancheros, jugadores, ... pero ellos no se arriesgan, están en el palco(no sólo el palco del estadio, el de la vida económica sobre todo) manteniendo distancia, cuidando su salud, mirando desde lejos a los gladiadores matarse entre ellos para el regocijo de su bolsillo.
Por lo menos así lo veo yo.
Y desde el gobierno nos dicen que hay que inmunizarse...
ResponderEliminar