Jugaba de lentes. Parecía un motociclista. Hijo de polacos, nació en el Chaco, pero se enamoró de una uruguaya y se vino a Montevideo. Fue campeón con Argentina y defendió a Uruguay en los Juegos Olímpicos. Adolfo Lubnicki, un caso único, de un tipo carismástico, que terminó peleando por la celeste. Foto gentileza Fabián Was Adolfo Lubnicki es dueño de una historia sumamente particular. Un caso excepcional y poco frecuente en el mundo del básquetbol: defendió a la Selección de Argentina y a la de Uruguay. Los eternos rivales del Río de la Plata. Y fue olímpico con los dos países. Originario de Charata, Chaco, Lubnicki era de los gauchos judíos. Sus padres eran polacos que se fueron al interior de Argentina escapando de la guerra. Y en medio de la nada nació Adolfo un 25 de julio de 1933. Era un flaco lungo de 1,94 metros que en aquella época llamaba la atención. Cuando se fue a vivir con su familia a Buenos Aires lo tentaron enseguida para jugar al básquetbol. Lo ficharon en el...